martes, 19 de junio de 2012

La Vía Láctea desde Pascua


¿Por qué se construyeron las estatuas de la isla de Pascua ? Nadie está seguro.
Lo que es seguro es que allí hay más de 800 enormes estatuas de piedra. Las estatuas de la Isla de Pascua tienen, en promedio, más del doble de la altura de una persona y tienen unas 200 veces más masa. Se sabe muy poco sobre la historia o el significado de estas insólitas estatuas , pero muchos piensan que se crearon hace unos 500 años como imágenes de los líderes locales de una civilización perdida.
La fotografía muestra algunos de los gigantes de piedra iluminados el 2009 bajo la parte central de nuestra galaxia, la Vía Láctea.

FUENTE: Observatorio.info

domingo, 17 de junio de 2012

China envía a su primera mujer astronauta al espacio

En su cuarta misión espacial tripulada, China ha lanzado este sábado a tres astronautas a bordo de la nave Shenzhou 9, incluyendo a su primera mujer. Tras su correspondiente cuenta atrás en mandarín, el cohete Larga Marcha 2F fue disparado a las 18.37 horas (12.37 en España) desde el centro de lanzamiento de Jiuquan, enclavado en el borde del desierto del Gobi en la provincia de Gansu, al noroeste del país.
Esta expedición es la más ambiciosa y compleja hasta la fecha porque los «taikonautas», como se denomina a los astronautas en mandarín, se acoplarán en órbita al laboratorio espacial chino que gravita en torno a la Tierra, a unos 343 kilómetros de altura. Mientras uno de ellos permanece en la cápsula por si ocurre alguna incidencia, los otros dos pasarán 13 días en dicho laboratorio realizando pruebas médicas y experimentos sobre los efectos de la falta de gravedad en el cuerpo humano.
«El acoplamiento manual es un examen tremendo para la habilidad de los astronautas a la hora de determinar la posición espacial, la coordinación visual y sus aptitudes psicológicas», explicó el jefe de la misión, el comandante Jing Haipeng, que ya ha participado en otra expedición anterior.

El programa espacial chino avanza

Desde un punto de vista técnico, la misión revela los extraordinarios progresos del programa espacial chino, que sin embargo han quedado eclipsados por la expectación que ha suscitado la presencia de la astronauta Liu Yang. A sus 33 años, y con dos de entrenamiento intensivo, esta piloto de las Fuerzas Aéreas se convierte en la primera china en volar al espacio. Entre sus méritos, debidamente publicitados por la propaganda estatal, destacan que una vez protagonizó un aterrizaje de emergencia después de que una bandada de pájaros chocara contra la cabina de su avión y averiara uno de sus motores. «No os decepcionaremos. Trabajaremos juntos para cumplir esta misión con éxito», prometió a los periodistas congregados en el centro de lanzamiento desde detrás de un cristal protector.
Para ello, la tripulación ha practicado la difícil maniobra del acoplamiento hasta 1.500 veces en un simulador, llegando a entrenarse durante 16 horas al día. «Una mirada, una expresión facial, un movimiento… nos entendemos de inmediato», indicó el responsable de la expedición.
Desde que, hace nueve años, China se convirtiera en la tercera nación del mundo con capacidad para poner un hombre en órbita tras Estados Unidos y Rusia, su programa espacial ha avanzado a pasos agigantados alimentado por su imparable crecimiento económico. En aquella gesta, que tuvo lugar el 15 de octubre de 2003, el comandante Yang Liwei dio 14 vueltas al planeta durante 21 horas y media a bordo de la cápsula Shenzhou 5.
Justo dos años después, China lanzó otros dos «taikonautas». Desde entonces, el autoritario régimen de Pekín ha invertido cada año más de 15.000 millones de euros en su programa espacial, auténtica cuestión de Estado y un motivo más de orgullo nacional.
En septiembre de 2008, Zhai Zhigang se convirtió en el primer chino en dar un paseo por las estrellas al salir de la nave y desplegar una pequeña bandera nacional en el espacio mientras su compañero, Liu Boming, se asomaba brevemente por la escotilla.

Laboratorio Tiangong 1

Manejado por control remoto, el laboratorio espacial Tiangong 1 (Palacio Celestial 1) gravita alrededor de la Tierra desde el pasado 29 de septiembre. En noviembre ya se acopló a él una nave no tripulada, pero el reto ahora consiste en que la tripulación lo haga de forma manual desde la cápsula Shenzhou 9. Dicha nave se basa en el modelo soviético Soyuz, que consiste en un módulo de propulsión, una cabina para la tripulación y un compartimento que puede permanecer en órbita cuando la nave regresa a la Tierra.
Con 10,4 metros de largo, 3,3 de ancho y un peso de 8,5 toneladas, el laboratorio espacial chino es el prototipo de una estación de varios módulos y mucho mayor que China quiere lanzar en 2020. A pesar de que alcanzará las 60 toneladas, será mucho más pequeña que la Estación Espacial Internacional gestionada por 16 países.
Tras las misiones con astronautas a bordo de las naves Shenzhou, China se ha marcado como objetivo para 2016 posar sobre la superficie lunar un vehículo no tripulado, pero dotado con robots que tomen muestras y regresen luego a la Tierra. El objetivo último es, por supuesto, enviar un hombre a la Luna.
Mientras tanto, EE.UU. contempla con preocupación el programa espacial chinos por sus implicaciones militares, ya que el régimen de Pekín ha demostrado ser capaz de destruir uno de sus propios satélites desde la superficie terrestre. Debido a estos recelos, Washington vetó hace dos décadas la inclusión de China en la Estación Espacial Internacional, lo que obligó a Pekín a desarrollar su propio programa para conquistar las estrellas. Ahora, puede ganarle a la NASA su carrera a la Luna, adonde nadie ha vuelto desde que los astronautas americanos del Apolo XVII la pisaran por última vez en diciembre de 1972.




Se ha descubierto que las pinturas de Altamira fueron hechas 10000 años antes de lo que se pensaba

 
Las pinturas rupestres de Altamira, así como las de otras cuevas del norte de España, podrían haber sido realizadas por neandertales y no por nuestros antepasados directos. Una nueva datación, llevada a cabo con la técnica uranio-torio en 50 pinturas de once cuevas españolas, ha revelado, en efecto, que esa forma de arte primitivo es por lo menos 10.000 años más antigua de lo que se creía y procede, por lo tanto, de una época en la que los primeros Homo sapiens aún no habían llegado, o estaban llegando, a Europa. El estudio ha merecido esta semana la portada de la revista Science.
Los investigadores, españoles, portugueses y británicos, dirigidos por Alistair Pike, del Departamento de Arqueología y Antropología de la Universidad de Bristol, analizaron 50 pinturas en once cuevas del norte de España, entre ellas las de Altamira, El Castillo y Tito Bustillo, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La datación de pinturas en cuevas es una tarea extremadamente difícil y para la cual los métodos tradicionales, como el del radiocarbono, no resultan adecuados. Según explica el propio Pike, «tenemos, o teníamos, un problema real a la hora de elaborar cronologías fiables para el arte rupestre. Y una de las razones para ello es que los arqueólogos utilizan el método de datación del radiocarbono, que no es adecuado para fechar pinturas que están elaboradas solo a base de pigmentos minerales (sin compuestos orgánicos)».

Medición con uranio

Además, segun Pike, hay un segundo problema cuando se datan por radiocarbono las pinturas rupestres: y es que «se toman muestras tan pequeñas que los efectos debidos a una contaminación externa se magnifican de forma tremenda. Por eso algunas dataciones por radiocarbono difieren de otras también hechas por radiocarbono en la misma pintura; o incluso fechas que se procesan de formas diferentes arrojan diferentes dataciones por radiocarbono. Por eso, hemos intentado evitar esos problemas usando un método completamente diferente y que está basado en la descomposición radiactiva del uranio».
Pike y su equipo pueden haber encontrado, de hecho, la forma de terminar con tanta controversia en la datación de las pinturas halladas en cuevas de toda Europa. Según Joao Zihao, profesor del ICREA (Instituto Catálan de Investigación y Estudios Avanzados) en la Universidad de Barcelona y coautor del trabajo publicado en la revista «Science», «uno de los mayores problemas es que sabemos muy poco sobre la cronología del arte rupestre europeo. No sabemos si llegó (a Europa) junto a los primeros humanos modernos (Homo sapiens, nuestra especie). No sabemos si ya estaba allí antes de que ellos llegaran».
Por eso, y dado que los métodos tradicionales de datación (como el radiocarbono), no funcionan en los pigmentos de las pinturas, en los que no hay elementos orgánicos, el equipo dirigido por Pike decidió datar las pequeñas incrustaciones calcáreas que se han ido formando con el tiempo sobre las propias pinturas. «Estas incrustaciones -explica Pike- se han formado por el mismo proceso que da lugar a las estalactitas y estalagmitas de las cuevas. E incorporan pequeñas concentraciones de uranio radiactivo que se van descomponiendo en torio a un ritmo constante. Midiendo la cantidad de torio presente, podemos saber con precisión la edad de las incrustaciones. Y dado que éstas se forman sobre las pinturas y que, en ocasiones, las propias pinturas están realizadas sobre esta clase de incrustaciones (grandes estalagmitas), podemos obtener una edad mínima y una máxima para las pinturas».

Siluetas de manos en El Castillo

Así, por ejemplo, los investigadores han determinado que las siluetas de manos que hay impresas en los muros de la cueva de El Castillo tienen, por lo menos, 40.800 años, lo que las convierte en las pinturas rupestres más antiguas de toda Europa, entre 5.000 y 10.000 años más antiguas que las que hay en Francia.
Más ejemplos: algunos de los símbolos de la famosa cámara policromada de Altamira tienen por lo menos 35.600 años de antiguedad. Es decir, 10.000 años más de lo que se pensaba. Altamira, además, fue periódicamente ocupada (y pintada) en un número indeterminado de ocasiones a lo largo de un periodo que abarca por lo menos 20.000 años.
Al aumentar la antigüedad de las pinturas rupestres aumentan también, inevitablemente, las dudas sobre la autoría de esas obras de arte primitivas. ¿Quién pintó las cuevas? Los nuevos datos implican que la tradición de pintar cuevas con pigmentos de colores empezó en Europa hace más de 40.000 años. Pero resulta que esa edad coincide plenamente con la llegada al Viejo Continente de los primeros humanos de nuestra propia especie. Por eso, Pike y sus colegas no pueden descartar la posibilidad de que los autores no fueran nuestros antepasados, sino la «otra» especie humana que por entonces vivía en Europa. Los neandertales, en efecto, ya estaban allí cuando los primeros «humanos modernos» llegaron.
En palabras del propio Pike, «las evidencias de la presencia de humanos modernos en el norte de España se remonta a hace 41.500 años. Antes de ese momento solo había neandertales». Lo cual, según los investigadores, abre tres posibilidades diferentes a la hora de explicar el origen de las pinturas rupestres. O bien los humanos modernos trajeron consigo la pintura como parte de su cultura; o bien la desarrollaron de forma muy rápida, nada más llegar, quizá como respuesta a la competencia con los neandertales; o bien las pinturas ya estaban allí y los artistas no fueron ellos, sino los neandertales.
La cuestión no es menor, ya que la capacidad de los humanos primitivos para crear arte se considera como un hito de la máxima importancia para la evolución de la cognición y la conducta simbólica, algo que está íntimamente relacionado con el desarrollo del lenguaje y nuestra capacidad de formar y vivir en sociedades complejas. Por no hablar, claro, de que hasta hace poco se pensaba que los neandertales carecían de esa conducta simbólica y que por eso sucumbieron sin remedio ante la llegada de los primeros Homo sapiens, nuestros antepasados, que gracias a su mayor capacidad intelectual terminaron por dominar por completo el continente europeo.
«Tenemos evidencias de arte simbólico prehistórico -explica Pike- en forma de cuentas perforadas, cáscaras de huevos grabados y pigmentos en África entre hace 70.000 y 100.000 años. Pero parece que las primeras cuevas decoradas están en Europa. Un argumento para apoyar este desarrollo es que la competencia por los recursos con los neandertales causó un incremento en la capacidad de innovación cultural de los primeros grupos de humanos modernos, algo que necesitaban para sobrevivir. La otra posibilidad es que el arte rupestre empezara antes de la llegada de los humanos modernos, y que sus autores fueran los neandertales. Lo que sería un hallazgo fantástico y supondría, además, que las famosas siluetas de manos en las paredes de las cuevas eran, en realidad, una firma neandertal, y no nuestra. Sin embargo, necesitamos llevar a cabo más dataciones para estar totalmdente seguros de ello».
Los investigadores, aunque aún no pueden demostrarlo sin posibilidad de error, se inclinan pues a pensar que la posibilidad más realista es precisamente la más espectacular: que los autores del arte rupestre no pertenecían a nuestra especie. De hecho, y a pesar de las evidencias africanas de un «arte simbólico» de 100.000 años de antiguedad, nunca se ha encontrado en el continente negro una cueva decorada. Las primeras, las más antiguas, son las del norte de España, y ahora sabemos que tenían, por lo menos, 40.000 años.

¿Por qué no en África?

¿Quién pintó esas cuevas? ¿Por qué no se ha encontrado arte rupestre en África? ¿Por qué, si «nosotros» ya teníamos arte simbólico hace 100.000 años, dejamos pasar 60.000 años antes de empezar a pintar cuevas? Las respuestas definitivas tardarán aún en llegar. Nuevas investigaciones podrían incluso encontrar muestras aún más antiguas y procedentes, por lo tanto, de una época en la que no había rastro de Homo sapiens en todo el continente europeo.
Los que sí estaban allí, durante más de 250.000 años hasta que llegaron los primeros hombres modernos, eran los neandertales...

CIENTÍFICOS ADVIERTEN DE UN COLAPSO PLANETARIO INMINENTE E IRREVERSIBLE

 
Las llamadas de atención ya han sido muchas pero ésta, por el prestigio de las voces que la realizan y lo tajante de su mensaje, quizás consiga, por fin, hacerse escuchar. Un renombrado plantel de 22 científicos de todo el mundo, entre ellos algunos españoles del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha advertido de que la Tierra se aproxima a un colapso inminente e irreversible. En cuestión de décadas, si no se toman las medidas adecuadas -algo para lo que, por fortuna, aún estamos a tiempo-, la humanidad se enfrentará sin remedio a un «nuevo régimen para el que no estamos preparados». El panorama desolador incluye carencia de alimentos y de agua potable, enormes sequías, extinción de especies y migraciones masivas de gente en busca de su propia supervivencia «como nunca hemos visto en la historia». Las causas, según explican en la revista Nature, son el brutal crecimiento de la población, la destrucción de los ecosistemas naturales en todo el mundo y el cambio climático.
Desde sus comienzos, la Tierra ha sufrido cinco grandes episodios de extinciones masivas asociados a cambios climáticos que han transformado las características de todo el planeta. El último gran gran cambio se produjo hace unos 14.000 años, cuando el 30% de la superficie terrestre perdió la capa de hielo que la cubrió durante el último período glacial. Desde entonces, el planeta se ha mantenido más o menos estable hasta la aparición y el desarrollo de la civilización humana. Sin embargo, los científicos creen que esto está a punto de cambiar. Y la culpa es nuestra.
Para empezar, somos muchos y consumimos demasiados recursos. La tasa de crecimiento anual de la población es de unos 77 millones de personas, casi mil veces superior a la experimentada hace entre 10.000 y 400 años. Hemos alterado el paisaje gravemente y emitimos a la atmósfera cantidades ingentes de CO2. «Sí, tenemos motivos para asustarnos. Hay grandes posibilidades de llegar a un punto de no retorno, catastrófico, para el que no hay marcha atrás, y las consecuencias pueden ser enormes para nuestra calidad de vida como especie. Tendremos problemas muy grandes», afirma a ABC.es Jordi Bascompte, biólogo de la Estación Biológica de Doñana, que ha participado en el trabajo.
El científico compara al mundo con una taza en el borde de una mesa a punto de caer y hacerse añicos. No parece que se produzcan grandes cambios mientras se acerca al filo, pero un ligero movimiento al final (léase, por ejemplo, una subida de temperaturas) y, de repente, el golpe puede ser terrible. La lista de fatales consecuencias es interminable. Perderíamos la polinización de los campos agrícolas -un proceso natural que hacen insectos como las abejas y del que dependen los cultivos-, muchas especies se extinguirían y otras se adaptarían, la provisión de agua potable y de alimentos sería mucho menor a consecuencia de la disminución de la biodiversidad y aumentarían las zonas mundiales desérticas. «Las grandes sequías conllevarían grandes migraciones y el regreso de enfermedades infecciosas que en el mundo occidental creemos erradicadas», apunta el biólogo. En palabras de Anthony Barnosky, profesor de biología en la Universidad de California Berkeley y principal autor de la revisión, «realmente será un nuevo mundo, desde el punto de vista biológico».

A tiempo de evitarlo

Y todo esto puede estar a la vuelta de la esquina. Los estudios realizados por los científicos, según han podido observar en ecosistemas locales, su particular bola de cristal, predicen que puede ocurrir alrededor del año 2025. Alrededor de esa fecha, si seguimos al mismo ritmo, habremos destruido el 50% de los hábitats naturales mundiales. Y en 2045, el 55% (ahora vamos por el 43%). «Es rápido, sabemos las causas y las implicaciones. Es un buen momento para actuar y evitarlo. Si la taza está en el borde es infinitamente más sencillo empujarla hacia el lado adecuado, aunque suponga un gran esfuerzo, que intentar repararla cuando ya haya caído», dice Bascompte.
Los investigadores creen que todavía estamos a tiempo de revertir la situación. Para ello, apuestan por frenar el crecimiento de la población, reducir el uso de energía per capita en los países del primer mundo y optar por las sostenibles, emplear los recursos de forma más racional e intentar proteger las zonas vírgenes de la Tierra.
Algunos quizás consideren estas conclusiones demasiado alarmistas. A ellos, Bascompte les diría que «esa es la realidad. Puede ser dura, pero es mucho mejor enfrentarse al problema que obviarlo. Es similar a alguien que tiene un cáncer y pretende ignorar lo que le dice el médico. Ignorar la información nunca es una buena decisión».

martes, 12 de junio de 2012

1º C. Material de trabajo para los exámenes de recuperación

Materiales para recuperar el primer trimestre:

- Documento 1. Conocimiento Ordinario - Científico. El Método Científico.
   Lo tenéis en este enlace

- Documento 2. Aplicación del método científico. ¿Llegó el hombre a la Luna en 1969?
   Presentación power-point sobre el tema. La tenéis en este enlace
   Texto de la presentación power-point anterior. Lo tenéis en este enlace

- Documento 3. Forma y tamaño de la Tierra. Aspectos históricos. Principales autores y teorías.
   Tenéis el documento en este enlace

- Documento 4. Libro de texto. Tema 1, páginas 5 a 21.
   En Página 8, en relación a las pruebas de la expansión del universo, se trató el documento sobre el Efecto Doppler que tenéis en este enlace

Materiales para recuperar el segundo trimestre:
- Los documentos y sus enlaces correspondientes son los que aparecen en la entrada del blog, del sábado 12 de mayo de 2012. En esa entrada se recoge todo lo relativo a la recuperación del segundo trimestre.

Materiales para recuperar el tercer trimestre:
- Durante el tercer trimestre se han hecho tres exámenes. Los correspondientes a los temas de trabajo 5 y 6, 7 y 8, del primer grupo de temas de trabajo, y el último examen de los dos primeros trabajos del segundo grupo, trabajos 9 y 10. Todos esos trabajos, con los documentos y enlaces correspondientes, se encuentran en sucesivas entradas del blog.

Aprender la tabla periódica de manera divertida

Un video de Manu Sánchez (presentador en Canal Sur 2), donde nos enseña la tabla periódica de manera graciosa y sencilla.


Video musical del tránsito de Venus


¿Qué es ese punto negro que cruza el Sol? Venus.
Seguramente, la visión más clara de Venus cruzando por delante del Sol la semana pasada se dio desde la órbita de tu Tierra. El Solar Dynamics Observatory captó una vista ininterrumpida del fenómeno y la grabó no sólo en luz visible sino también en bandas de luz ultravioleta. Como muestra, esta composición en vídeo del tráfico acompañado de música.
El evento podría implicar un éxito científico por la determinación de los componentes de la atmósfera de Venus pero, sin duda, supuso un éxito cultural para la participación de personas de todo el mundo en la observación de la inusual fenómeno astronómico. Desde muchos lugares del mundo (y desde el cielo) se exhiben con orgullo numerosas imágenes espectaculares de este tránsito de Venus.

FUENTE: Obsevatorio.info

domingo, 10 de junio de 2012

El misterioso bombardeo cósmico del siglo VIII

ENCUENTRAN EN LOS ANILLOS DE LOS ÁRBOLES LAS HUELLAS DE UNA POTENTE Y EXTRAÑA OLEADA DE RADIACIÓN PROCEDENTE DEL ESPACIO EXTERIOR QUE LLEGÓ A LA TIERRA HACE MÁS DE MIL AÑOS

A finales del siglo VIII, la Tierra fue alcanzada por una potente y misteriosa oleada de radiación procedente del espacio exterior. Sus huellas, impresas en los anillos de los árboles de la época, han sido encontradas ahora por científicos japoneses. El impacto de aquellos rayos cósmicos habría sido más que suficiente para inutilizar en todo el mundo una buena parte de los ordenadores y de los sistemas de comunicaciones por satélite. El estudio se acaba de publicar en Nature.

Las pistas son muy claras. Hace exactamente 1.237 años, algo muy extraño sucedió en nuestro vecindario espacial. Algo que provocó un "bombardeo" de rayos cósmicos de una intensidad nunca vista contra nuestro planeta. Los restos de aquél evento han quedado registrados en los anillos de árboles de todo el mundo.

Aunque muy pocas veces nos demos cuenta de ello, la Tierra sufre de forma constante el impacto de billones de protones y otras partículas de altas energías procedentes de fuentes espaciales muy energéticas. El Sol, las supernovas y otros objetos mucho menos evidentes, como lejanísimos púlsares, quasares, magnetares y estrellas de neutrones, emiten de forma constante cantidades ingentes de radiación en todas las direcciones posibles, incluída la nuestra. Sin embargo, la procedencia de estos rayos sigue siendo desconocida.

Ahora, en la Universidad japonesa de Nagoya, un equipo de investigadores dirigido por Fusa Miyake ha encontrado en dos cedros milenarios una tasa espectacularmente elevada de carbono-14 (un isótopo radiactivo del carbono) en los anillos correspondientes a los años 774 y 775 de nuestra era. Lo cual significa que durante ese periodo nuestro planeta sufrió un intenso bombardeo de rayos cósmicos.

Y no es el único caso. Otro equipo de científicos, de la Universidad de Queen, en Belfast, también ha encontrado tasas inusualmente altas de carbono-14 en anillos de árboles que sugieren un evento cósmico de grandes proporciones sucedido alrededor del año 770. Su trabajo, sin embargo, no ha sido aún publicado.

Huellas reconocibles


¿Pero qué tiene que ver el carbono-14 con los rayos cósmicos? Cuando las partículas espaciales llegan a la atmósfera, colisionan y reaccionan con el oxígeno y el nitrógeno terrestres y crean nuevas partículas, entre ellas carbono-14, elemento que es absorbido por la biosfera y que deja, por lo tanto, huellas reconocibles. Por ejemplo, los árboles lo capturan durante la fotosíntesis y lo fijan de manera indeleble en sus anillos anuales de crecimiento.

Fue precisamente así, midiendo el índice de carbono-14 de dos viejos cedros japoneses, cuando Miyake y su equipo se dieron cuenta de que, en los anillos correspondientes a los años 774 y 775 había un incremento del 1,2% de ese elemento con respecto a los demás años. Y aunque un 1,2% puede parecer poca cosa, no lo es si se tiene en cuenta que la variación anual típica del carbono-14 es apenas de un 0,05%. De hecho, ese 1,2% supone un incremento masivo en la cantidad de carbono-14 absorbido durante esos años por los dos árboles.

De inmediato, surgió la pregunta. ¿De dónde vino el bombardeo de radiación del finales del siglo VIII? Las respuestas pueden ser varias. Una posible fuente de rayos cósmicos es el Sol, cuya actividad, como se sabe, varía en periodos de once años de duración y que, en ocasiones, nos sorprende con intensas llamaradas cuyos efectos llegan hasta la Tierra.

La otra posibilidad para un evento tan poderoso sería la explosión de una supernova, la muerte violenta de una estrella en nuestro "vecindario" espacial. Sin embargo, ninguna de estas dos posibles explicaciones convence a los investigadores. Si el bombardeo lo produjo el Sol, debió de ser durante una erupción solar como jamás hemos visto, y de una intensidad tal que resulta casi inimaginable. Si algo así se produjera hoy en día aniquilaría sin contemplaciones y de un solo golpe las redes eléctricas y de comunicaciones de todo el mundo.

Y si hubiera sido una supernova, deberíamos seguir viendo su brillo, que puede durar fácilmente varios miles de años antes de extinguirse del todo. Además, no existen documentos del año 775 que reflejen un acontecimiento que, si se produjo, debió de llamar poderosamente la atención de los habitantes del planeta. Investigaciones recientes muestran que, por aquella época, sí que se produjeron dos supernovas, Casiopea A y Vela Jr. Pero ambas tan lejos y tan poco potentes que no habrían podido provocar un aumento masivo de carbono-14 en la Tierra...

«Serpientes en el cielo»


Así que, mal que les pese a los científicos, el origen del mayor bombardeo de rayos cósmicos del que se tiene noticia sigue siendo un misterio. "Con nuestros actuales conocimientos -admite Miyake- no podemos especificar la causa de ese evento. Sin embargo, sí que podemos decir que un acontecimiento extremadamente energético sucedió en nuestro entorno espacial alrededor del año 775, sin que la causa fuera una llamarada solar o una supernova".

Para llegar al origen de la cuestión, Miyake y su equipo tendrán que seguir trabajando. Los pasos siguientes para intentar aclarar el misterio son estudiar la abundancia de otros elementos, como el berilio, y bucear a fondo en los archivos históricos para comprobar si, hace 1.237 años, alguien, en algún lugar, vio una extraña llamarada en el cielo.

En este sentido, según publica New Scientist, Mike Baillie, investigador de la Universidad de Queen que estudia los anillos de los árboles, ha encontrado ya un registro histórico, aunque posterior, que hace referencia al fenómeno. Se trata del cronista inglés Roger de Wendover, que en el siglo XIII escribió: "En el año de nuestro Señor de 776, espantosos signos de fuego fueron vistos en los cielos tras el anochecer. Y aparecieron serpientes en Sussex, surgiendo del suelo, para el asombro de todos".

EL VÍDEO MÁS IMPACTANTE DEL TRÁNSITO DE VENUS



Venus se muestra como una peca perfecta, y a la velocidad del vídeo, el movimiento del planeta se aprecia mejor y resulta aún más admirable. Estas imágenes del tránsito de Venus han sido conseguidas por el Observatorio de Dinámica Solar (SDO) de la NASA.

Para ver el vídeo usar este enlace

miércoles, 6 de junio de 2012

El mito del vampiro hecho realidad

 ARQUEÓLOGOS DE BULGARIA HAN DESTERRADO DOS ESQUELETOS DE LA EDAD MEDIA (DE HACE 800 AÑOS) PERFORADOS CON BARRAS DE HIERRO EN SUS PECHOS


La acción de clavar una estaca a un vampiro no es una leyenda que aparece en la novela <<Drácula>> –que recopiló el autor irlandés Bram Stoker en 1897 sobre los cuentos populares de la Europa del Este– o un mito como se ha plasmado en tantas películas de terror, donde los muertos vivientes perseguían a los vivos, sino que el apuñalamiento en el tórax no es ficción, es una realidad.
Arqueólogos de Bulgaria han desenterrado dos esqueletos de la Edad Media –de hace 800 años– perforados con barras de hierro en sus pechos. Los han hallado en una excavación al lado de un monasterio en la ciudad Sozopol, junto al Mar Negro.
«Estos dos esqueletos apuñalados con barras de hierro ilustran una práctica que era común en algunos pueblos de Bulgaria, hasta la primera década del siglo 20.», explicó el director e historiador del Museo Nacional de Bulgaria, Bozhidar Dimitrov en un medio búlgaro.  
En los últimos años, se han encontrado a más de 100 cadáveres apuñalados en Bulgaria. Esta práctica se hacía para evitar que las personas que habían tenido mala reputación a lo largo de su vida se convirtieran en vampiros. Por ello, antes de ser enterradas se les clavaba una vara de hierro o de madera antes de ser enterrados para que no se levantasen de sus tumbas a medianoche, comentó el historiador.
«No sé por qué esta práctica se hizo tan común y popular. Tal vez por el misterio de la palabra "vampiro"», agregó Dimitrov. Según el director del Museo Nacional de Bulgaria, la mayoría de estos vampiros eran aristócratas y clérigos. Y «lo curioso es que no hay mujeres entre estos hallazgos. No tenían miedo a las brujas».
Sin embargo, hace dos años, el antropólogo forense italiano Mattero Borrini descubrió en una fosa común de 1576 en Lazzaretto Nuovo (a tres kilómetros de Venecia) el cadáver de una mujer, considerada como «mujer vampiro». La hallaron con un ladrillo en la boca para evitar que siguiera «mordiendo y chupando sangre». Esta práctica también se realizaba porque se apoyaba en la creencia medieval de que los vampiros estaban detrás de la propagación de la peste. El esqueleto fue desenterrado en una fosa común de la plaga veneciana de 1576 –durante la que murió el pintor Tiziano– y que fue empleado como un sanatorio para enfermos de la plaga.
La sucesión de plagas que asolaron Europa entre los años 1300 y 1700 fomentó la creencia en los vampiros, debido a que la descomposición de los cadáveres no se comprendía bien, explicó Borrini.
Los sepultureros veían a los muertos en todos sus estados de descomposición. Esto incluía hinchazón abdominal combinada con <<fluidos de purga>> secretado por la nariz y la boca, que “podían fácilmente ser confundidos con sangre succionada por un vampiro.”, comentó Borrini.
Además, a los muertos se les cubría sus caras con mortajas, que a menudo se descomponían debido a las bacterias en la zona de la boca. Incluso, por ello, pasaron a conocerse <<comedores de mortajas>>.

Así fue el último tránsito de Venus de nuestras vidas

EL FENÓMENO, QUE NO SE VOLVERÁ A VER HASTA EL AÑO 2117, HA CREADO UNA GRAN EXPECTACIÓN EN TODO EL MUNDO

Esta madrugada, Venus ha pasado por delante de la cara del Sol produciendo una silueta que nadie vivo en la actualidad es probable que vuelva a ver otra vez.
Los tránsitos de Venus son muy raros. Llegan en pares separados por más de cien años. Este tránsito de junio pone el colofón final al par de 2004-2012, así que el fenómeno no se repetirá hasta el año 2117. Afortunadamente, este magnífico evento ha sido ampliamente visible en buena parte del mundo. Observadores de todos los continentes, incluso una pequeña porción de la Antártida, han podido contemplarlo.
El tránsito duró unas siete horas. Empezó pocos minutos después de la medianoche (hora peninsular española) y finalizó a las 6.55 (hora peninsular española), aunque desde España solo se podía observar desde ciertas zonas del noreste.
El fenómeno fue seguido por numerosos telescopios en todo elmundo. La sondas europeas Venus Express y Proba-2, junto con la internacional SOHO, la japonesa Hinode, y el telescopio espacial Hubble, no se lo perdieron. La tripulación de la Estación Espacial Internacional (ISS) también estuvo pendiente del tránsito.

Podéis ver un vídeo en este enlace

viernes, 1 de junio de 2012

Información sobre el Tránsito de Venus

El tránsito de Venus será retransmitido a través de Internet, en directo, la noche del 5 al 6 de junio.


Para más información sobre la retransmisión usad este enlace